Marín Giménez es una empresa especializada en la elaboración de frutas. El objetivo básico de la empresa es lograr productos con un alto estándar de calidad y de seguridad en condiciones de competencia, estando presente actualmente en los sectores lácteos, bebidas, confituras y alimentación infantil.

Fundada en 1957 como una empresa familiar de conservas vegetales, es en la actualidad un referente dentro del sector, por su renovada tecnología para envasado aséptico aplicada a fruta particulada y el continuo desarrollo de nuevos productos a medida de cada cliente.

La actividad principal de la compañía es la transformación y conservación de frutas en envase aséptico, habiendo incorporado a su gama de productos la producción de fruta congelada IQF mediante tecnología criogénica.

Marín Giménez transforma en la actualidad una producción media anual superior a las 50.000 toneladas de fruta.

Marín Giménez ofrece a sus clientes la mejor calidad, un servicio versátil y una distribución eficaz en toda su gama de productos. Todo ello es posible gracias a un gran equipo humano al que se han transmitido los valores de familia y que contribuyen activamente en el progreso tecnológico y de avance en seguridad alimentaria, tan imprescindibles como demandados por el consumidor.

Marín Giménez cuenta con unas instalaciones a la vanguardia de la tecnología, más de 100.000 m2 donde los distintos procesos de fabricación se suceden bajo la supervisión de un equipo humano altamente cualificado.  En estas instalaciones, cerca de 50.000 toneladas de frutas son procesadas anualmente, en sus diferentes formatos, cortes y tamaños según las preferencias establecidas previamente por cada cliente.

Dependiendo de los picos de producción, una media de 400 trabajadores se dan cita cada campaña para hacer posible la consecución de los objetivos que la empresa se marca con respecto a la calidad, presentación y singularidad de sus productos.

La cultura de buenas prácticas en cuanto a higiene, indumentaria de los trabajadores, limpieza, códigos de actuación y formación en cada puesto de trabajo, está perfectamente instaurada y se lleva a cabo sin ninguna excepción.

Gracias a su espíritu innovador, Marín Giménez ha sido capaz de adaptarse y evolucionar con el paso de los años, obteniendo como resultado una industria viva y avanzada dentro del sector.